Tener las uñas presentables requiere dedicación. Fortalecer y pintar las uñas, debe ser una ceremonia donde el apuro no favorece los resultados.
Existen muchos productos para fortalecer las uñas y estimular su crecimiento, pero nunca está demás saber preparar un fortalecedor de uñas natural:
Mezclar 2 cucharadas de aceite de oliva con un poquito de salvia. Calentar en baño María durante 5 minutos y dejar reposar un rato. Sumergir las uñas durante 15 minutos y repetirlo una vez por semana.
Cuando nos pintamos las uñas y nos gana la impaciencia, hay dos trucos infalibles para lograr un secado rápido: un minuto después de haber aplicado el color, meter las manos en el freezer durante unos segundos o pasar las uñas por un chorro de agua fría, casi helada.
Cuando descubrimos que el esmalte de uñas está espeso, jamás debemos agregarle acetona porque aunque parezca mejorarlo, en realidad lo estropeará.
La solución es colocar el frasco de esmante de uñas en una cacerola con agua hirviendo durante unos minutos. Se debe tratar que no entre aire en el frasco. Y cada vez que te pintes las uñas intentá tener abierto el envase del esmalte el menor tiempo posible. Para conservar bien el esmalte, guardarlo en la heladera.
